Hemos seleccionado algunos de los testimonios de ex residentes cuya rehabilitación nos llena a todos de orgullo y alegría. El caso de Christopher es de los mas especiales pues aparte de su historia pasada, actualmente ejerce un montón de acciones encaminadas a concienciar de que se puede salir. Sin duda su testimonio que ahora os plasmamos demuestra una vez más que cuando se quiere se puede.

En 2003 salí de la prisión de Valdemoro después de 6 años de privación de libertad como consecuencia directa de mis 20 años de dependencia física, emocional y espiritual a la heroína. Eso me daba a veces, durante aquellos 20 años, respuestas frente a una vida y un mundo tan incompresible, pero su uso continuado me empujó a perder todo. No sólo lo material, si no lo más importante: la empatía, la dignidad, la capacidad de amar y ser amado.

Salí de prisión libre de drogas con una abstinencia de alrededor de dos años, cosa que para mí era inconcebible durante mi trayecto de consumo activo. Pero prefiero hablar del proceso de este viaje de descubrimiento personal que me brindaron en el piso de Hontanar.

“En Hontanar cuando yo preguntaba «¿Qué debo hacer? “me enseñaban a preguntarme «¿Quién quiero llegar a ser?»”
Sin embargo, ver la recuperación desde la perspectiva de un proceso personal abre nuevas y valiosas formas de pensar sobre el inicio y el mantenimiento de la recuperación de la drogadicción en los individuos. Eso sí, recordando que nosotros mismos no siempre somos dueños de nuestros procesos personales.

Quizás la ventaja más notable de este enfoque es que se nos permite ir más allá del dualismo cansino del marco puramente médico o las construcciones morales de la adicción y la recuperación. Cada proceso es individual, existen muchos caminos para llegar a Roma.

En el piso de Hontanar en vez de contestar cuando yo preguntaba: «¿Qué debo hacer?» me enseñaban que una pregunta más profunda era: «¿Quién quiero llegar a ser?» Es una pregunta que me ha servido bien desde 2003, y este año 2013 me llena de orgullo anunciar que he acabado mi licenciatura en psicología y con un máster en terapia cognitivo conductual.

Actualmente tengo la suerte de trabajaren la red pública de tratamiento al drogodependiente donde mi experiencia tiene aplicación directa. Cuando me preguntan: “¿Qué debo hacer?”. No puedo evitar una pequeña sonrisa cuando les contesto “…no sería mejor preguntar ¿Quién quiero llegar a ser?”.